Reseña: El Silmarillion
EL SILMARILLION. J.R.R. TOLKIEN.
Sinopsis:
El Silmarilion es una obra editada por Christopher Tolkien tras la muerte de su padre. J.R.R. Tolkien no dejó la obra acabada por lo que Christopher se vio en la necesidad de valerse de material en distinto estado de finalización y de usar su propio talento para darle una forma final.
Los Silmarils, que dan nombre al libro, son unas joyas de excelsa belleza y de gran poder que sirven de hilo conductor y que relacionan buena parte de las historias del libro.
En el libro nos encontraremos con varias historias que transcurren a lo largo de toda la historia del Mundo inventado por J.R.R. Tolkien, teniendo un especial peso las transcurridas en la Primera Edad. Así hallaremos, entre otras, el Ainulindalë y el Valanquenta, donde se nos mostrará la creación de Arda (el mundo) y los primeros problemas en esa creación; también nos encontraremos historias ambientadas en la Primera Edad, como “La historia de los hijos de Hurin”, “La historia de Beren y Lutuien” y “La Caída de Gondolin” de gran peso en la mitología Tolkiniana; relacionada con la Segunda Edad, leeremos la historia de la “Akallabêth”, donde se narran los porqués de la caída de los Númenóreanos.
Reseña:
Desde que se publicó este libro no he leído más que alabanzas, así que probablemente lo que aquí se viene sea una "Unpopular Opinion".
Para empezar, Tolkien no quiso publicar El Silmarillion en un primer momento, fue su hijo Christopher quien lo editó y puso en venta en su lugar, pero el propio autor decía que no eran más que anotaciones para escribir sus obras inspiradas en un mundo que no existía, que él creó. Y leyéndolo, realmente te das cuenta de que las archiconocidas El Señor de los Anillos o El Hobbit, son mucho más que meras novelas, que el trabajo que hay detrás es extenso y sublime.
Pero El Silmarillion es un cuaderno de notas. Por mucho que lo vendan como novela, no lo es. Así que está bien si lo queréis tener en casa como una enciclopedia, para echar un vistazo de vez en cuando al mundo de Arda, del que proviene la Tierra Media y descubrir alguna curiosidad de su historia, pero no esperéis encontrar un nuevo Señor de los Anillos, porque os decepcionará.
El libro tiene cinco partes bastante diferenciadas, que eran independientes en un primer momento:
La Ainulindalë: Narra como el único Dios, Eru, crea a los Ainur, que serán los creadores o modeladores de Arda.
El Valaquenta: Cuenta como uno de estos Valar, poseído por la soberbia y el orgullo, deafiará a Eru y a sus semejantes y se convertirá en el primer Señor Oscuro.
El Quenta Silmarillion: Los Silmarils eran tres gemas creadas por Fëanor, el más grande y polémico de los reyes Noldor. Contenían la luz de los Dos Árboles de Valinor. Los árboles fueron destruidos por Morgoth y la luz sólo pervivió en los Silmarils. Morgoth robó los Silmarils y desató la hégira de los Noldor, su juramento, y su vuelta a la Tierra Media manchados por la sangre y por una maldición divina. Esta parte del Silmarillion forma el grueso del libro y cuenta historias de los Elfos, hombres y enanos de la Primera edad, destacando la confrontación del bien contra el mal.
La Akallabêth: Habla del nacimiento y la caida del Reino de Numenor, y como sus descendientes serán los dúnedain (Aragorn será uno de esos descendientes).
La Historia de los Anillos de Poder y la Tercera Edad: Trata sobre la creación de los anillos, de cómo se forjó el Único y como fue perdido y cayó en el olvido. Termina justo antes de ser encontrado, ya que esa es la historia que se narra en ‘El Hobbit‘ y en ‘El Señor de los Anillos‘.
Las historias que se van contando en ellas son bastante interesantes, es mitología, pero el ritmo es muy lento, así que es mejor tomárselo con calma, en mi opinión, e ir leyendo poco a poco cada una.
En cualquier caso, si os gusta la fantasía y, por extensión, El Señor de los Anillos, recomiendo que lo intentéis con El Silmarillion. Y si se os hace demasiado pesado, siempre podéis recurrir a YouTube, donde hay cientos de vídeos contando la historia de la Tierra Media, sacada prácticamente entera de las historias de este libro.
Lo mejor: Tolkien es capaz de crear un mundo, con su propia historia, lengua y mitología, de la nada. Es increíble pensar que todo el mundo de Arda haya salido de una sola mente. De SU mente.
Lo peor: no es una novela, es un libro de notas. Sacia la curiosidad por saber cómo se creó todo, pero no hay acción, no hay personajes con los que empatizar. En cierto modo, se podría definir como el libro de historia de los estudiantes de la Tierra Media.
Puntuación:
★★★☆☆
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